lunes, 4 de enero de 2021

EN HOMENAJE DE LA FRATERNIDAD ROSACRUZ DE MEXICO AL INSTRUCTOR DE LA FRATERNIDAD ROSACRUZ MAX HEINDEL

 



MAX HEINDEL

Astrólogo, Ocultista y Místico Cristiano

Max Heindel, Iniciado Rosacruz y fundador de la Fraternidad Rosacruz, nació el 23 de julio de 1865. Su Padre fue Frankz L. Von Grasshoff, de una familia noble conectada con la corte alemana durante el tiempo del Principe Bismarck. 

Después de emigrar a Copenhague, Dinamarca, conoció a una mujer danesa con la cual se casó y de cuyo matrimonio nacieron tres hijos. 

El mayor de éstos fue Karl Ludwig Von Grasshoff quien más tarde adoptó el seudónimo de Max Heindel.

El principal obstáculo de Max Heindel era un cuerpo magullado y herido. 

A los 8 años de edad sufrió un accidente en su pierna izquierda, a raíz de un juego con varios compañeros camino a la escuela. 

La ciudad de Copenague (Dinamarca) cuenta con varios riachuelos, o más bien, canalizaciones con orillas a cada lado, usadas para irrigar diferentes partes de la ciudad.

Los muchachos saltaban sobre estas zanjas, las que en algunos lugares eran realmente anchas y el joven Max tenía que escalarla; el resultado fue que cayó y se y apoyó primero en el talón dándose un tremendo golpe y produciéndole mucho dolor.

Aunque más tarde fue a la escuela permaneció sentado el resto del día con un horrible dolor en el pie; toda la noche resistió el sufrimiento sin querer contarlo a su madre, porque el día anterior los niños habían estado jugando y evadiendo ciertas responsabilidades de estudio. 

Al día siguiente en la escuela se desmayó y fue necesario cortar un zapato para librar su pie hinchado. Luego vinieron 16 meses en un hospital en Copenague.

A la edad de dieciséis años Max Heindel entró en los astilleros de Glasgow, Escocia, donde aprendió ingeniería. 

Como ingeniero en Jefe de un vapor comercial hizo varios viajes a muchas tierras, obteniendo así un amplio conocimiento del mundo y de la gente.

Entre los años 1895 y 1901 fue ingeniero de consulta en la ciudad de Nueva York. 

Durante este tiempo se casó, pero el matrimonio terminó por la muerte de su esposa en 1905. 

Un hijo y dos hijas nacieron de esta unión. 

Después de mudarse a Los Angeles, California, en 1903, Max Heindel se interesó en el estudio de la metafísica, adhiriéndose a la rama local de la Sociedad Teosófica y sirviendo como su vicepresidente de 1904 a 1905. 

Durante el tiempo que pasó allí comenzó a crecer dentro de él un intenso deseo de comprender la causa de los dolores y sufrimientos de la humanidad y de ayudar a aliviarlos. 

Inició el estudio de la astrología y encontró para su deleite que le daba la clave por medio de la cual podría abrir los misterios de la naturaleza interna del hombre.

Hasta su desprendimiento a los Planos Superiores el 6 de enero de 1919, estuvo activo haciendo el trabajo precursor de fundar la Fraternidad, incluyendo la adquisición de terrenos para el establecimiento de la Sede Internacional en Oceanside, California, la construcción de los necesarios edificios, publicación de diferentes libros.

Tomado de el Libro El Nacimiento de la Fraternidad Rosacruz.

"Mount Ecclesia ha sido mi hogar por más de cinco años y he tenido la oportunidad de verificar mis primeras impresiones. 

"Para el mundo en general Max Heindel fue el Estudiante y Profesor de Misticismo. 

Muchos en todo el mundo han recibido su primera impresión del ocultismo de él. 

Para aquellos que seguían sus cursos de correspondencia tanto Estudiantes como Probacionistas, él era nuestro Líder autorizado por los Hermanos Mayores para guiarnos en los más elevados misterios de la Filosofía Rosacruz, pero para quienes hemos tenido el privilegio de vivir en la Sede Central y que vimos al hombre y también al Hermano Lego, él era un ejemplo vivo de sus enseñanzas. 

"Modesto, evadía la multitud que venía con preguntas curiosas aunque a quienes venían pidiendo ayuda siempre era amable y una torre de fortaleza, un hombre de pocas palabras, pero aquellos que necesitaban ayuda recibían una respuesta que llevaba convicción y que los satisfacía. 

Nos enseño a servir con su propio ejemplo. 

Era uno de nosotros y amaba a su hogar, era el más considerado de todos y servía donde se le necesitaba. 

Este ha sido un trabajo duro precursor; artemisa y malas hierbas cubrían los terrenos cuando fueron comprados hace 8 años. 

Nunca nos faltó dinero para lo que era necesario. 

Pero por desgracia los trabajadores que venían, enviados por nuestros Hermanos Mayores, porque nadie vino que no fuera enviado, con frecuencia le fallaban. 

Fue la prueba de ellos y no estaban preparados. 

Si la bomba estaba descompuesta allá en el valle, él bajaba con el pie lisiado y la mala circulación, una distancia de 235 pies y la reparaba, para que Mount Ecclesia pudiera tener agua! si algo le fallaba al automóvil allí estaba él de espaldas debajo del carro arreglándolo. 

Mas tarde se hizo necesario que se convirtiera en el mecánico de nuestra imprenta, pues eran escasos los mecánicos competentes en el linotipo debido a la Guerra. 

"Hace cinco años lo vi venir a la vieja tienda que entonces servía como comedor para más de 50 personas, con balde y estropajo para limpiar el cuarto, porque todo Probacionista varón consideraba esto un trabajo demasiado servil para ellos, y no permitía que ninguna mujer los hiciera en tanto que hubiese varones por ahí. 

El fue el arquitecto de nuestros muchos edificios y cuando los trabajadores fallaban se le podía ver subiéndole las tejas a los que estaban arriba. 

Su corazón se afligía de ver en que muchos en quien él confiaba le habían fallado. 

"Y así el frágil cuerpo cedió bajo la presión cuando se le pudo haber salvado para ésta gran obra si todos hubiesen hecho su deber. 

"El amaba estas montañas y colinas, el San Jacinto coronado de nieve y la amplia extensión del Océano Pacífico con sus crepúsculos siempre cambiantes. 

"Siempre el caballero, nunca temía mostrar su amorosa consideración por su compañera, porque eran uno en Alma y en Espíritu. 

Un fuerte lazo une a todos aquellos que hemos tenido el privilegio de conocer al hombre y al Líder. 

No podemos olvidar su fuerte voz cuando nos dirigía al cantar en la pro Ecclesia, ni la feliz y radiante sonrisa con que saludaba a aquellos a quienes les tenía confianza.  

Pueden algunos de nosotros que estuvimos aquí en Navidad olvidar la cena de Navidad y la tarde que le seguía. 

Cuan feliz alegre y chistoso era Mr. Heindel, las canciones que cantaba con su rica voz de bajo, los cuentos que contaba y las bromas que contaba?. 

Y además en nuestra pequeña fiesta de Año Nuevo era uno de los más alegres, aplaudiendo cordialmente los esfuerzos de los otros, y siempre listo a hacer su parte para alegría de todos. 

Nadie puede olvidar su canto para nosotros de la versión del marino de "Adonde vas, mi querida doncella" con la melodía antigua lo que hizo muy apropiadamente. 

"Extrañamos su presencia física, aunque él es todavía nuestro Líder, y todavía escuchamos su voz repitiendo su poema favorito "La muerte no existe", 

Extractos de "Ecos de Mount Ecclesia" Marzo 1919 

A Considerar en su Biografía

Max Heindel sufrió constantemente a causa de heridas recibidas mientras era un muchacho. 

Un número de operaciones sin éxito, que habían removido algunas de las venas y arterias de su pierna izquierda, interfirieron de manera importante con la circulación en su cuerpo, desarrollando con el tiempo un problema vascular en su corazón. 

Sin embargo, él fue bendecido con una gran energía indomable, y nunca permitía que su condición física interfiriera con su trabajo por la humanidad.

Él tenía un mensaje que dar al alma enferma del mundo y nada debería interferir. Muchas de sus lecciones, letras y libros fueron escritos mientras estaba en cama, después de pasar noches de sufrimiento. 

Pero el mundo no lo sabía, por la fiel esposa que lo protegía y estaba siempre lista a asistirlo y animarlo. 

Estas dos almas enfrentaron muchos días oscuros juntos, pero con felicidad en el amor que se tenían uno a otro, sabiendo que ellos eran los instrumentos por los cuales un gran mensaje iba a ser dado al mundo.

Max Heindel llegó a Los Angeles, California, en 1903, donde trabajó como ingeniero por un tiempo, pero la enfermedad lo atrapó. 

El hambre y la privación eran su compañía del diario, sin embargo nunca estuvo ocioso. 

Con un espíritu intrépido y una determinación para superarse a lo largo de las líneas mentales más avanzadas, él se interesó en el estudio de la metafísica y se unió a la Sociedad Teosófica de Los Ángeles, de la cual fue vicepresidente en 1904 y 1905. 

Su corazón estaba siempre anhelante por el conocimiento de los misterios profundos de la vida.

Sus primeros años estuvieron llenos de arrepentimiento y despertó su mente a la búsqueda de la explicación de la vida y del ser y creó en él un deseo de entender el dolor, privaciones y sufrimientos de la humanidad. 

El pensamiento que estaba siempre en su mente era encontrar algunos medios con los cuales ayudar a aligerar la carga de sus hermanos y hermanas en el mundo. 

Esta luz comenzó a mostrarse cuando encontró las enseñanzas que habían sido dadas por Madame Blavatsky de la Sociedad Teosófica. 

Mientras estuvo conectado con esta sociedad conoció a la mujer quien fue años después su inspiración espiritual. 

Ella fue quien lo ayudó a encontrar trabajo. Augusta Foss quien estaba interesada en líneas similares de búsqueda y ella fue el instrumento quien interesó a Max Heindel en la ciencia de la astrología. 

En esta ciencia él encontró un campo con muchas posibilidades como una ciencia verdadera del alma. 

Esta le dio la llave con la que pudo quitar el candado de los misterios de la naturaleza interna del hombre. 

Al aprender a conocer y entender las debilidades del carácter entonces él podía guiarlos y ayudarles a encontrar su propio lugar en el mundo.

La privación y el trabajo en exceso le ocasionaron un problema severo en el corazón en 1905, y por meses él estuvo cerca de la muerte, pero al recuperarse él tenía una percepción más intensa de las necesidades de la humanidad. 

Él se dio cuenta que la humanidad no sufría tanto por la necesidad de comida física sino por el hambre espiritual que les guiaba a hacer cosas que traerían sufrimiento sobre ellos.

Durante esta temporada una amiga que viajaba a Alemania había conocido al Dr. Rudolph Steiner y se había enamorado de las enseñanzas de este Doctor. 

En sus cartas a Max Heindel le pedía insistentemente que viniera a Alemania a escuchar a este hombre, pero Max Heindel se hallaba feliz trabajando al norte y además no tenía los medios para emprender tal viaje. 

Esta amiga sin embargo insistía tanto que regresó a América a persuadirle en persona de venir a Alemania a entrevistarse con este instructor.

Le ofreció incluso pagar los tiquetes de ida y vuelta y por fin Max Heindel accedió y partió rumbo a Alemania. 

Este viaje fue iniciado en el otoño de 1907. 

Luego de asistir a algunas de las conferencias del Dr. Steiner quedó desilusionado e inquieto porque lo que aquel enseñaba Max Heindel ya lo conocía y buscaba Enseñanzas para el mundo Occidental y lo que el   ofrecía eran parecidas a su propio conocimiento, donde el también compartía temas de oriente.

Cuando le mencionó esto a su amiga, ella se resintió grandemente y esto motivo la ruptura de la amistad entre los dos.

En el otoño de 1907, había ido a Alemania con la esperanza de contactar a los Hermanos Mayores de la Orden Rosacruz, no teniendo el éxito que esperaba, según le pareció a él, y con gran decepción se preparaba para regresar a América; pero un día le apareció un visitante de quien luego aprendió era un Hermano Mayor de la Orden Rosacruz, (y quien se convirtió en el Maestro). 

Este Ser estaba vestido en su cuerpo vital, y le ofreció impartirle las Enseñanzas por las cuales él había gastado tiempo y dinero tratando de encontrarlas en Alemania; pero estas enseñanzas podrían solo ser dadas ante él. 

Max Heindel, debería hace una promesa solemne de nunca divulgarlas, (debían permanecer en secreto). 

Habiendo pasado a través de un período infeliz de hambre del alma, él estaba más que deseoso de compartir sus conocimientos con otros, quienes como él mismo estaban buscando. 

Él se negó a aceptar cualquier cosa que no pudiera ser dada a conocer al mundo. El Maestro le dejó.

Después, el Maestro apareció en su cuarto otra vez y le dijo que él, Max Heindel, había pasado su prueba. 

Él Maestro le manifestó, que si él hubiera aceptado el ofrecimiento, es decir, mantener las enseñanzas en secreto, él, el Hermano Mayor, no habría regresado. 

Le dijo que el candidato que ellos habían elegido primero, que había permanecido bajo instrucción por muchos años, había fallado al presentar la prueba en 1905; también que Max Heindel había estado bajo observación de los Hermanos Mayores por un número de años como el candidato más conveniente, por si el primer candidato fallaba. 

(Rudolf Steiner)

Además le dijeron que las enseñanzas deberían ser dadas a conocer al público antes de que terminara la primera década del siglo, que sería a finales de diciembre de 1909.

En esta última entrevista con el Maestro, él recibió instrucción acerca de cómo ponerse en contacto con el Templo de la Rosa Cruz. 

En este Templo Max Heindel pasó un poco más de un mes en comunicación directa con y bajo las instrucciones personales de los Hermanos Mayores, quienes le impartían la mayor parte de las enseñanzas contenidas en “El Concepto Rosacruz del Cosmos”. 

El primer bosquejo de este libro, que había sido hecho mientras él estaba en el Templo, el Maestro le dijo que no era más que un esbozo.

Lo pesado de la atmósfera física de Alemania, era particularmente adaptada para la comunicación de los pensamientos místicos de la conciencia de los candidatos, pero a él le habían dicho que las trescientas cincuenta páginas de su manuscrito que había hecho no le satisficieran cuando él estuviera en la eléctrica atmósfera de América y que entonces desearía rescribir el libro entero. 

En su gran entusiasmo él al comienzo lo dudó. Él creyó que había recibido un mensaje maravilloso completo. 

Pero las predicciones de los Hermanos Mayores se hicieron realidad. Después que el Sr. Heindel había pasado unas pocas semanas en la ciudad de Nueva York, lo que los Hermanos Mayores le habían dicho se convirtió en realidad. 

El estilo en que el manuscrito había sido escrito no le convenció, y se dio a la tarea de hacerlo de nuevo.

Regreso a América en la primavera de 1909 donde él enseguida comenzó a formular el mensaje Rosacruz que había recibido de parte de los Hermanos Mayores. Este fue dado al mundo en la forma de un libro titulado “El Concepto Rosacruz del Cosmos”, que es una obra maestra de la literatura mística. 

Contiene uno de los más comprensivos y completos escritos, redactado de manera sencilla, sobre la historia de la evolución de la tierra y el hombre que se hayan escrito en siglos. 

Un ministro de una de las iglesias en la parte noroeste de América hizo el comentario que él tenía dos libros en su mesa de la biblioteca de donde sacaba sus pensamientos para sus sermones; uno era la Biblia y el otro era “El Concepto Rosacruz del Cosmos” de Max Heindel que le permitió ver a través de los misterios de la Biblia para él. 

Este libro está ahora traducido en ocho diferentes idiomas.

En noviembre de 1909, después de un tour de lectura exitoso, Max Heindel regresó a Los Angeles donde se reunió con mucho éxito en grupos de lectura y enseñanza.

En agosto de 1910, se unió en matrimonio con Augusta Foss, la mujer que había sido el instrumento de ayuda para él para encontrar la verdad. 

Con esta ayuda e inspiración el campo de su trabajo se incrementó grandemente de tal manera que pronto se hizo necesario que un cuartel general fuera establecido para el propósito de diseminar la Filosofía Rosacruz. 

Durante los primeros ocho meses estos dos pioneros vivieron en una pequeña casa de madera de una sola planta en Ocean Park, California, con muy poco dinero pero con el espíritu determinado de comenzar cursos por correspondencia de la filosofía Rosacruz. 

Después se cambiaron a radicar permanentemente a Oceanside, California. 

En esos diez años que Max Heindel vivió, al comenzar este gran trabajo para los Hermanos de la Rosa Cruz, él dio tantos libros al mundo como es de ordinario en la vida de un autor de tiempo completo

En la primavera de 1910 después de un curso de lecturas y lecciones llevadas a cabo en la ciudad de Los Ángeles, Max Heindel cayó enfermo seriamente del corazón. 

En el hospital, y después de consultarlo varios doctores, quienes, bajo la impresión de que estaba inconsciente, discutían el caso al lado de su cama, escuchándolos decir que por su estado no podría vivir una noche más, ya que su caso no tenía esperanza. 

Después que los doctores se fueron, Max Heindel, con la asistencia de su Maestro, trabajaron en su cuerpo con el resultado que en tres horas después de que los doctores habían pronunciado su pronóstico él le pidió a un amigo, a quien llamó, que lo llevara a tomar aire en una silla de ruedas; y en una semana después de su experiencia Max Heindel estaba dictando su segundo libro, “La Filosofía Rosacruz en preguntas y respuestas” a un estenógrafo.

Después que este libro fue terminado, Max Heindel comenzó de nuevo un tour de

lectura en los estados de Washington y Oregon, pero fue incapaz de soportar la tensión de la reunión del público, así que regresó al sur de California y nuevamente cayó enfermo como resultado de exceso de trabajo. 

Una vez que se recuperó tuvo muchos deseos de escribir su tercer libro, “Los Misterios Rosacruces”. Es extraño de decir que Max Heindel realizó su mejor trabajo inmediatamente después de cada vez que caía enfermo de gravedad, era entonces cuando parecía estar más cerca de su Maestro y en relación armoniosa con los mundos espirituales.

Con muy poco dinero y un cuerpo en sufrimiento, Max Heindel y su compañera valiente y leal comenzaron su trabajo pionero en Oceanside, California, de donde las Enseñanzas Rosacruces fueron distribuidas y esparcidas sobre el mundo entero. 

Los diversos libros fueron traducidos e impresos en idiomas extranjeros; lecciones fueron enviadas por correspondencia y formaron grupos en muchas ciudades grandes. 

Como una cadena sin fin, las Enseñanzas se esparcieron, pero el trabajo en el plano físico de este gran mensajero estaba por terminar.

Su compañera había sido bien entrenada para llevar el trabajo en el plano físico porque un trabajo mayor le esperaba en los planos altos. 

Él estaba bien enterado que sus días eran pocos, y él preparó su trabajo para que cuando su llamado viniera la señora Heindel pudiera continuar sin él. 

Los últimos días de su vida estuvieron llenos de paz, incluso de felicidad, estando la señora Heindel con él en su oficina. 

Después del desayuno en enero 6 de 1919, ella fue llamada a su oficina para terminar algo de trabajo dirigiendo a las secretarias. 

Alrededor de las 4 pm, Max Heindel, quien había hecho un borrador de una carta para la encargada de la oficina local de correos, trajo la carta a la oficina de la señora Heindel para su aprobación, porque él nunca hacía cambios o comenzaba un nuevo proyecto a menos que lo consultara con su pareja en quien confiaba.

Mientras la señora Heindel estaba leyendo su carta, Max Heindel, quien había estado de pie a su lado, cayó lentamente a la carpeta; no cayó pesadamente como es usual, como si unas manos amorosas lo hubieran estado sosteniendo y lo hubieran depositado abajo gentilmente. 

Sus últimas palabras mientras miró hacia arriba a la cara de la señora fueron, “Estoy bien querida”, y pasó a la inconciencia. 

Con estas amorosas palabras es sus labios pasó al Gran más allá, donde él a través de su devoción a Dios y a la humanidad había preparado un gran trabajo con el grupo de “Ayudadores Invisibles”, a través de los cuales el trabajo de curación es llevado a cabo. 

¿Ha finalizado el trabajo de Max Heindel?.

No verdaderamente, el trabajo especial en que la Orden Rosacruz está interesada, es que los Ayudadores Invisibles, a través de los cuales se hace un gran trabajo de curación, sea realizado a través de una Escuela de preparación en su manifestación visible que es la Fraternidad Rosacruz, donde los Estudiantes se preparan en la Unión de la mente y el corazon, afiliándose en sus trabajos de Estudio de los diferentes Cursos disponibles que cualquier sincero Aspirante desea llevar a cabo y la obtención del Método del Conocimiento Directo , así como en el trabajo de los Rituales de los diferentes Servicios devocionales, de Curación, de las festividades Espirituales de los Solsticios y Equinoccios y de Lunas (solo Probatorios)

A Max Heindel le aseguró su Maestro que él era el instrumento a través del cual un gran movimiento sería inaugurado, un movimiento que tendría una misión especial: hacer de la religión cristiana un factor de vida en la tierra.

 En Amoroso Servicio

Fraternidad Rosacruz de Mexico