sábado, 31 de diciembre de 2022

EL ZODIACO Y LA CONSTRUCCIÓN DEL TEMPLO VIVIENTE

 

EL ZODIACO Y LA CLAVE DE LA CONSTRUCCIÓN DEL TEMPLO VIVIENTE  

  https://www.facebook.com/fraterrosmex/

La doctrina del Renacimiento postula un proceso lento de desarrollo conseguido con una firme persistencia a través de repetidas encarnaciones en formas o cuerpos de mayor eficiencia, alternando en cuerpos de hombre y mujer y en diferente influencia solar al nacimiento, así pues se comprende que algunos de nosotros estamos aprendiendo una clase de lecciones y algunos están aprendiendo otras de diferente índole.

Los Estudiantes que hemos hollado este Sendero por ya varios años, hemos usado el discernimiento para comprender algunos mensajes que nos permitan avanzar de mejor y mas rápida forma. 

De ahí es preciso para el Estudiante de las benditas Enseñanzas Rosacruces  el que comprenda que debe recorrer los así llamados 12 caminos de la influencia Estelar para su adecuado desarrollo, pudiendo avanzar  más rápido si comprende  el hermoso mensaje que nos dan los 12, y que tenemos la oportunidad de ver día a día en nuestra familia, trabajo, reunión, con aquellos que nos relacionamos, ya que en los aspectos buenos o malos esto predomina, pero será importante escoger aquello que nos enaltece como los valores Superiores de estas amadas Jerarquías.

Cuando el Sol entra en Aries, es el principio de la primavera, el surgimiento de las fuerzas de la naturaleza, la irrupción de los primeros brotes. Este impulso prosigue en Tauro y en Géminis, con la aparición de las hojas y de las flores. 

Con Cáncer comienza el verano: se forma el grano, después el fruto madura (Leo) y una vez maduro, se recolecta (Virgo). 

Después viene el otoño (Libra, Escorpio, Sagitario): se recogen los últimos frutos, caen las hojas, la vegetación muere y se descompone. 

Finalmente, llega el invierno (Capricornio, Acuario y Piscis): el grano es enterrado en el suelo, donde muere y se funde con la tierra; pero de esta muerte nacerán las nuevas simientes que producirán nuevos crecimientos y nuevas floraciones.

Así pues, en cada signo, el Sol lleva a cabo determinados trabajos. Este trabajo del Sol en la vegetación puede ser interpretado, desde el punto de vista alquímico, como la transformación de la materia de la Piedra Filosofal que, al igual que el grano, se cuece, se pudre, resucita, etc...

Pero el trabajo alquímico no consiste sólo en transformar la materia de la Piedra Filosofal. 

Para el discípulo, el verdadero trabajo alquímico consiste en desarrollar las simientes enterradas en sí mismo, de la misma forma que las fuerzas de la naturaleza hacen crecer los gérmenes enterrados en el suelo, y, precisamente, cada signo del zodíaco posee un aspecto positivo y otro negativo.

El Discípulo, debe luchar contra cada uno de los aspectos negativos y, por el contrario, desarrollar en sí mismo los aspectos positivos de cada uno de los 12 trabajos a desarrollar, empezando con modificar su influencia y aprendiendo de todos.

Reajustar nuestros pensamientos o cuerpo mental (AIRE)

Reajustar nuestros sentimientos o cuerpo de deseos (AGUA)

Reajustar nuestros hábitos (FUEGO)

Reajustar nuestras acciones o cuerpo físico (TIERRA)

Reajustar nuestro Cuerpo Vital (ETER)

1-. En Aries debe luchar contra el lobo y el jabalí de Marte (la violencia salvaje, la crueldad) y alimentar en sí mismo el deseo de hacer los sacrificios necesarios para que se produzca la germinación.

2-. Debe vencer el materialismo y la sensualidad de Tauro, y adquirir su paciencia, su tenacidad y su fuerza.

3-. Debe luchar contra las tendencias nocivas de Géminis, con su intelecto siempre presto a engañar, a criticar, a calumniar, y estar dispuesto, en cambio, a manifestar los preceptos del amor y de la sabiduría.

4-. Debe dominar la emotividad, la imaginación crepuscular y desordenada de Cáncer, favorecida por la Luna, y sensibilizarse a las corrientes espirituales, tener el deseo de elaborar su vida y de purificar todas las fuerzas que le han sido dadas.

5-. Debe vencer el orgullo y la ostentación de Leo para desarrollar su nobleza, su grandeza, su rectitud.

6-. Debe vencer la estrechez de espíritu, la sequedad y la avaricia de Virgo, y aprender su pureza, su gusto por el orden y el método.

7-. Debe vencer la pereza y la indecisión de Libra y desarrollar su necesidad de armonía y belleza.

8-. Debe triunfar frente a los celos y a las pasiones sexuales de Escorpio, y estar siempre dispuesto a morir a todo aquello que es inferior, como lo enseñaba Cristo-Jesús cuando decía: «Si no morís, no viviréis».

9-. Debe luchar contra el instinto de rebelión y la inestabilidad de Sagitario, y ser capaz de elevarse constantemente hasta Dios, de poseer un pensamiento poderoso y de defender la ciudadela de los Iniciados, de los hijos de Dios. Sagitario es el defensor que está subido a las murallas desde donde vigila, con el arco tendido, para proteger el Reine de Dios, la Fraternidad Blanca Universal.

10-. Debe vencer el orgullo, la dureza y la intransigencia de Capricornio, para alcanzar, a través de la meditación y la contemplación, las más altas cimas de las montañas espirituales.

11-. Debe vencer el individualismo, la necesidad de escándalo y de rebelión de Acuario, para fundirse con la inmensa comunidad de la fraternidad universal, en la vida cósmica.

12-. Debe escapar de las brumas y las prisiones internas de Piscis, y aprender su abnegación, renuncia y sacrificio.

Así, el trabajo del discípulo consiste en recorrer todos los signos, luchando consigo mismo contra todos los enemigos: los jabalís, los lobos, los leones, los toros, las aves, las cabras, los escorpiones, etc....

Cuando estos trabajos estén terminados y haya adquirido las doce virtudes, como Hércules, llegará a ser un Candidato. 

A través de los mitos y de las religiones se encuentran indicios de la iniciación; el mismo lenguaje la misma sabiduría, solo las formas varían. 

Por todas partes se enseña al hombre cómo puede llegar a ser un ser superior, un héroe, una divinidad.

Nosotros debemos esforzarnos para perfeccionarnos e incluso, si no lo lograremos estaremos justificados ante el cielo.

El cielo nunca nos acusará de no haberlo conseguido; son los esfuerzos los que cuentan y estos depende de nosotros.

Cuando el cielo vea que no cesamos en el esfuerzo, decidirá darnos todo lo que pidamos, y la alegría la luz, la belleza y la libertad s e derramarán sobre nosotros. 

Estos regalos serán seleccionados según quien los solicite, teniendo en cuenta su carácter, su estructura y sus afinidades, así como el trabajo que hubiese realizado, en función de lo que sea necesario para su evolución.

Al igual que el pez, cada cual sacará estos regalos del océano cósmico y extraerá de ellos los elementos susceptibles de formar su piel, su apariencia su inteligencia.

Podríamos extendernos más ampliamente sobre este tema, estudiar también las correspondencias que existen entre los doce signos del zodiaco y las doce piedras preciosas que formaban los cimientos de La Nueva Jerusalén, así como los doce apóstoles. 

Por hoy, contentaros con estas revelaciones, que va os proporcionan inmensas posibilidades para vuestro trabajo espiritual.

Hagamos una Regeneración en nuestras vidas con el fin de trabajar amorosa y sinceramente en el glorioso día de la Liberación de nuestro Amado Maestro Cristo Jesus.

 Centro de Estudios de la Sabiduría Occidental Mexico

No hay comentarios:

Publicar un comentario