EL HOMBRE REFLEJO DE LAS ENERGÍAS DEL COSMOS

 

EL HOMBRE REFLEJO DE LAS ENERGÍAS DEL COSMOS

El cuerpo humano está formado por una serie de tubos yuxtapuestos y a través de ellos circula la energía cósmica; el fuego secreto de los filósofos.

La palabra anatomía viene del griego y quiere decir corte; éste estudio muestra que nuestro cuerpo tiene una serie de sistemas y aparatos tubulares. El más importante, porque es el que soporta el peso de nuestro cuerpo y nos mantiene erectos, es el esqueleto y es de aquí de donde emergen los demás sistemas.

Otros sistemas tubulares los tenemos en nuestra circulación sanguínea y linfática; lo mismo ocurre en la excreción renal, uréteres, uretra y también en el gran tubo central que es el aparato digestivo, necesario ara la nutrición de la vida celular. 

Del proceso digestivo se tiene como elaboración la linfa que se va a convertir en el plasma sanguíneo.

La sangre en su composición procede de la médula ósea y de la linfa, originada en el proceso digestivo, es decir, los alimentos se transforman en quimo, este en quilo y luego en linfa y la linfa en sangre como substancia plástica; pero la energía de la vida inherente en la sangre se deriva a través del canal medular del esqueleto; luego cierta cantidad de energía de aquella sublimada pasa al cerebro y a través de los plexos coroides que están debajo de la zona talámica, una quinta esencia se filtra de la sangre y pasa hacia todas las ramificaciones nerviosas, aparato de la sensibilidad, mientras que esa sustancia filtrada por los plexos coroides, se le llama líquido cefalo- raquídeo, instrumento de la conciencia.

Los sistemas nerviosos son los aparatos de la divinidad, por medio de los cuales ella se manifiesta en la naturaleza humana. 

La Divinidad es la Vida; es lo que llaman Dios, que se manifiesta en diferentes estados para hacer posible la actualización de la consciente divinización del ser.

Es increíble que en una humanidad tan antigua como la nuestra se encuentren personas que no existe lo divino, pues nunca han pensado todo lo que significan todos esos procesos fisiológicos, psíquicos, anímicos y espirituales tan maravillosos; y en esta mutación, cuál es el arquitecto? 

El fuego interno, el Espíritu Divino dentro del hombre.

Al comprender esto realmente, busca en el ser humano el ser mas devoto y místicos de la vida.

Los hematíes o glóbulos rojos de la sangre, se generan en la médula de los huesos, y de allí pasan a constituir la sangre que e llevada por medio de las arterias hacia todo el cuerpo para nutrir las células y renovar su vitalidad, mientras que el sistema nervioso recoge los productos e desecho hacia los riñones que filtran la materia más pesada y el pulmón para el intercambio gaseoso.

El sistema nervioso cerebro- espinal sale como ramificaciones en medio de vértebras y la vértebra grande (cráneo) como dijo Goethe, es simplemente una ampliación ósea para dar cabida al cerebro; aparato de la inteligencia.

El sistema gran simpático, surge del cerebelo y del diencéfalo como sistema liso por todo el cuerpo, haciendo eclosión en el plexo solar; de allí que se encuentren tan series dificultades para nuestro ser psico-físico en este centro.

Por el sistema nervioso gran simpático circula la energía cósmica y si lográsemos poner nuestra consciencia en conexión con éste sistema, no tendríamos ninguna dificultad en conocer el pasado, el presente y el futuro nuestro, de la humanidad, de las razas y del planeta, porque allí está la consciencia de lo cósmico.

Al gran simpático se le puede llamar Macrocosmos dentro del hombre, mientras que el sistema nervioso cerebro espinal, que es una evolución de aquél, sería nuestro microcosmos, porque allí está el hombre con su mente, su raciocinio, su egotismo etc.

Los plexos son aquellos puntos en donde éstos dos sistemas nerviosos se interrelacionan, siendo posible por su intermedio que el hombre vaya progresivamente penetrando de la conciencia racional a la consciencia cósmica.

El sistema nervioso cerebro-espinal funciona con descargas eléctricas; la sangre es Electro-Magnética y en la médula ósea tenemos la electricidad cósmica en estado estático y en los nervios en estado dinámico; por eso son bio-electro-magnéticos y el misterio de la Vida está en el magnetismo que son todas las energías de la Naturaleza, que circulan en nosotros y su uso inteligente es lo que conduce a los asombrosos fenómenos llamados milagros, actuando con el Logos que es la fuente de la Vida Universal, logrando así la verdadera superación.

En amoroso Servicio

Fraternidad Rosacruz de Mexico