EL ETERNO AHORA

 

EL ETERNO AHORA

El eterno ahora es la frase que a veces usan los filósofos para enfatizar la importancia del presente, ya que es allí cuando decidimos cómo redimir el pasado y forjar el futuro. 

Bajo la Ley de Consecuencia, lo que hagamos ahora (sea bueno o malo) determinará nuestras condiciones futuras.

Mantener la conciencia en ese presente o ahora ayuda también a determinar si estamos aprendiendo las lecciones que nuestro pasado nos impuso o las estamos demorando; solo es necesaria una permanente atención sobre nuestras expresiones y un perfecto análisis de las circunstancias presentes. 

De todas maneras, poca gente parece creer en ello. 

O viven en el pasado, lamentando los buenos o malos tiempos o viven en el futuro que no ha legado y que no saben cómo será, quizás temerosos, quizás esperanzados. 

Aun así, el presente no tiene más significado que “algo que debe ser pasado tan fácil y placenteramente como sea posible”. 

Obviamente, bajo tales circunstancias su desarrollo es eminentemente lento.

Nuestro uso del momento presente saca a flote nuestra comprensión y habilidad para actuar con responsabilidad y con nuestro entendimiento, es decir, poner en práctica la buena voluntad de progreso espiritual y el reconocimiento humilde de nuestros errores para luego rectificar. 

Tenemos en nuestras manos el conocimiento de las experiencias del pasado y sobre nuestros hombros pesan nuestras transgresiones, las cuales no hemos transmutados en virtudes o en ideales elevados a seguir.

A través de las actividades en el presente es determinado el futuro, sea éste personal o el de todo el género humano. 

El momento presente tiene una ventaja sobre todos los demás momentos de nuestra vida, y es que podemos hacer lo que deseamos, ya que lo tenemos a nuestra disposición para hacer de él algo bueno o algo malo. 

Las pasadas oportunidades ya no están ni volverán, y las futuras todavía no han llegado, así que, el momento presente representa la oportunidad para forjarnos un futuro venturoso y servicial; todo depende de si somos conscientes de cada ahora para actuar consciente y voluntariamente.

En Amoroso Servicio

Fraternidad Rosacruz de México