¿Por qué se debe ocultar la Sabiduría y cómo acceder a ella?
Aprendemos de San Pablo en su Primera Epístola a los Corintios, Capítulo 2 y versículos 7 al 10 que:
“Enseñamos la sabiduría de Dios, misteriosa y escondida, que Dios antes de los siglos destinó para nuestra gloria.
Ninguno de los príncipes de este mundo la conoció, porque si la hubieran conocido, no habrían crucificado al Señor de la Gloria.
Más, como está escrito, lo que ojo no vio, ni oído oyó, ni corazón de hombre percibió, esto lo ha preparado Dios para los que le aman.
A nosotros, sin embargo, Dios lo reveló por el Espíritu.
"Porque el Espíritu todo lo escudriña, hasta lo más profundo de Dios“
El hecho de que la “Sabiduría de Dios” se haya ocultado y sea un “misterio” para la humanidad se debe al evento conocido como “La Caída del Hombre”.
En cierto punto de su largo recorrido evolutivo septenario, para pasar de una "conciencia colectiva" a una "autoconciencia", así fue que nos desviamos del plan divino original que nos había sido reservado.
Con eso cristalizamos tanto que perdimos el contacto consciente con los Mundos y los seres, ahora invisibles para nosotros.
Al mismo tiempo y de la misma manera, perdimos la conciencia de las verdades espirituales relacionadas con nuestro origen y peregrinaje en la materia.
Anteriormente, en un momento determinado de la Época Lemuriana, nuestra conciencia estaba enfocada en los reinos espirituales.
Desconocemos el proceso físico de propagación, nacimiento y muerte del cuerpo denso.
Cuando nuestros “ojos se abrieron”, nuestra conciencia se proyectó hacia afuera, en relación con los hechos de esa Región Química del Mundo Físico.
Entonces cambiaron las condiciones.
Poco a poco, después de eso, nuestra conciencia interior, relacionada con los Mundos Superiores y los seres pertenecientes a ellos, fue desapareciendo.
Sin embargo, el nadir de la materialidad fue finalmente superado en la segunda mitad de la Época Atlante (recuerde: estamos en la Época Aria); Cristo , el más poderoso de los Arcángeles, vino al mundo, fue crucificado y se convirtió en el Espíritu Interior de nuestro Planeta (el Espíritu Planetario).
Desde el centro de la Tierra Él irradia Su poderoso amor, ayudándonos a alcanzar la perfección de nuestro cuerpo denso para que pueda fusionarse con el cuerpo vital. (este proceso se llama eterificación del Cuerpo), expandir nuestras facultades espirituales y así recuperar nuestra herencia perdida.
Así se nos revelará la "sabiduría oculta" y penetraremos en la esencia, intuitivamente, de las cosas que " Dios ha preparado para los que le aman ".
La Filosofía Rosacruz describe el proceso intuitivo de la siguiente manera:
“A medida que la sangre pasa por el corazón, ciclo tras ciclo, hora tras hora, durante toda la vida, imprime las imágenes que porta en el Átomo Simiente del cuerpo denso ( ubicado en el ápice del ventrículo izquierdo del corazón), haciendo un registro perfecto de la vida.
Y que esté siempre en contacto con el Espíritu de Vida , el Espíritu de Amor y Unión”.
“Por lo tanto, el corazón es el hogar del amor desinteresado”.
“En la medida en que estas imágenes pasan internamente al Mundo del Espíritu de la Vida , donde se encuentra la verdadera Memoria de la Naturaleza , para volverse conscientes, podemos recuperar tales imágenes de experiencias pasadas, no por el lento proceso ordinario de los sentidos, sino directamente a través del cuarto Éter, el Éter Reflector , contenido en el aire que respiramos.”
"En el Mundo del Espíritu de Vida , nuestro vehículo del Espíritu de Vida ve mucho más claramente que en los Mundos más densos ".
“Allí (que es también aquí, porque los Mundos superiores interpenetran a los inferiores) el Espíritu de Vida , segundo aspecto de nuestra Trinidad interna (que es Espíritu Divino, Espíritu de Vida y Espíritu Humano ), está en contacto con la Sabiduría Divina y en cualquier situación sabe, inmediatamente, qué hacer, transmitiendo el mensaje de la acción adecuada, directamente al corazón que, a su vez, lo retransmite rápidamente al cerebro, a través del nervio neumogástrico o nervio vago.
Así es como surgen las “primeras impresiones”, el impulso intuitivo que siempre es bueno porque proviene directamente de la fuente del Amor y la Sabiduría Cósmicos ”.
Este proceso es instantáneo y tan rápido que el corazón, más sensible y habiéndolo recibido de primera mano, tiene el control antes de que la lenta razón haya tenido tiempo de orientarse.
Este primer impulso, si es realmente intuitivo, es verdadero.
Seguirlo es un camino de felicidad para nosotros.
Pero para la mayoría de nosotros, no muy alertas, la Mente , el razonamiento, muchas veces condena y sacrifica este primer impulso.
Realmente “pensamos lo que hay en nuestros corazones” y eso siempre es cierto.
Pero el “racionalista” que confía sólo en su capacidad de análisis, a menudo juzga, en el fondo, ¡que la verdad no es verdad !
¡Dichosos aquellos que pueden llegar a este estado y unir la Mente con el Corazón!.
Ideal de nuestras amadas Enseñanzas.
En Amoroso Servicio
Fraternidad Rosacruz de Mexico
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